KnoWhy #784 | Marzo 25, 2025
¿Dónde profetizó Ezequiel que sería destruida la Iglesia Grande y Abominable?
Publicación aportada por
Scripture Central

"Y la grande y abominable iglesia, que es la ramera de toda la tierra, será derribada por fuego devorador, de acuerdo con lo declarado por boca de Ezequiel el profeta, quien habló de estas cosas, las cuales no han acontecido, pero vivo yo, que ciertamente acontecerán, porque no han de reinar las abominaciones". Doctrina y Convenios 29:21
El conocimiento
En septiembre de 1830, José Smith recibió una revelación que hablaba de algunas de las señales que ocurrirían antes de que el Salvador regresara a la tierra. Muchos de estos eventos serían familiares para los lectores de la Biblia. Sin embargo, se mencionó uno que no se aclara explícitamente en los escritos bíblicos. Específicamente, el Señor atribuyó a Ezequiel la profecía de que "la grande y abominable iglesia, que es la ramera de toda la tierra, será derribada por fuego devorador" (Doctrina y Convenios 29:21).
En ninguna parte del libro de Ezequiel del Antiguo Testamento se encuentra este lenguaje, ni tampoco se encuentra en la traducción inspirada de la Biblia de José Smith1. Naturalmente, esto podría llevar a muchos lectores a preguntarse dónde se puede encontrar tal profecía en el libro de Ezequiel. John A. Tvedtnes ha identificado tres posibilidades para explicar esta profecía aparentemente desaparecida.
En primer lugar, es posible que el Señor se esté refiriendo a una profecía que una vez se encontró en el libro de Ezequiel pero que estaba entre las "cosas claras y preciosas del libro, el cual es el libro del Cordero de Dios" (1 Nefi 13:28). Esta posibilidad es especialmente digna de mención porque las fuentes cristianas y judías tempranas proporcionan pruebas de que el libro de Ezequiel puede haber pasado por una revisión significativa.
"Varios de los Padres de la Iglesia de los primeros siglos de la era cristiana citaron fragmentos de Ezequiel que no se encuentran en el libro bíblico de ese nombre", observó Tvedtnes2. Esto incluía varios relatos que se han conservado en otros lugares, pero que Epifanio, Tertuliano, Gregorio de Niasa y Clemente de Alejandría atribuyen a Ezequiel3.
En otros casos, los primeros cristianos citaban pasajes que recordaban a otros pasajes de Ezequiel, pero que eran materialmente diferentes de cualquier versión existente del libro que tenemos hoy. Por ejemplo, después de que Clemente de Roma citara Ezequiel 33:11, dijo que el Señor "añadió también a esta misericordiosa declaración: 'Convertíos, casa de Israel, de vuestra iniquidad; decid a los hijos de mi pueblo: Aunque vuestros pecados se extiendan desde la tierra hasta el cielo, y aunque sean más rojos que la grana y más negros que el sayal, si os volvéis a mí de todo corazón y decís 'Padre', yo os escucharé como a un pueblo santo'" 4. Así pues, Clemente conocía algún pasaje atribuido a Ezequiel que no se encuentra en ningún otro lugar de la Biblia.
Este pasaje también se incluyó en la Exégesis sobre el alma encontrada entre los códices de Nag Hammadi, pero atribuye este pasaje a un profeta no identificado. Además, el pasaje está relacionado temáticamente con otros pasajes de Ezequiel, lo que podría reforzar su asociación con ese profeta, según la carta de Clemente de Roma5.
Un fenómeno similar se encuentra con Clemente de Alejandría, quien escribió: "Él [el Señor] dice, pues, por Ezequiel, dirigiendo Su discurso a los ancianos, y poniendo ante ellos una saludable descripción de Su sabia solicitud: 'Y a la coja la vendaré, y a la enferma la sanaré, y a la errante la haré volver; y la apacentaré en mi santo monte'"6. Este pasaje es temáticamente paralelo a Ezequiel 34:14-16 y a menudo se considera una lectura variante, pero también es posible que fuera otro pasaje eliminado por escribas posteriores. Tvedtnes también ha observado tradiciones relativas a la lucha de algunos rabinos por comprender y aceptar partes de Ezequiel como canónicas en los primeros siglos d. C., lo que podría haber estimulado algunas ediciones del texto7.
En segundo lugar, Tvedtnes señala que es posible que la profecía incluida en Doctrina y Convenios 29:21 "estuviera incluida en otro de los libros de Ezequiel que ya no existe"8. Los expertos en el cristianismo primitivo adoptan ocasionalmente un enfoque similar al tratar también el pasaje de 1 Clemente. Michael W. Holmes planteó la hipótesis de que es posible que Clemente citara "una obra apócrifa atribuida a Ezequiel"9. Esta posibilidad también se ha señalado en la antigüedad. Josefo cuenta que "Ezequiel... dejó por escrito dos libros" sobre las calamidades que sobrevendrían a los malvados10.
Tvedtnes también ha observado que entre los Rollos del Mar Muerto se encuentran copias fragmentarias de un libro similar a Ezequiel. Según Tvedtnes, este texto "se ha denominado “Pseudo-Ezequiel” porque contiene pasajes del Ezequiel bíblico que varían de lo que se encuentra en el Texto Masorético estándar y algún material que no se encuentra en Ezequiel en absoluto. No está claro si se trata de una variante del libro de Ezequiel o de un libro aparte"11. Algunos expertos se han referido incluso a este texto como el Segundo Ezequiel12. Por tanto, no se descarta la existencia de un libro perdido de Ezequiel.
Una tercera opción que Tvedtnes cree que puede explicar este pasaje de Doctrina y Convenios podría ser simplemente que el Señor parafraseó una profecía existente de Ezequiel utilizando lenguaje del Libro de Mormón. Específicamente, la profecía de la batalla de Gog y Magog en Ezequiel 38-39 podría encajar con la descripción de la gran y abominable iglesia siendo destruida.
Como señala Tvedtnes, "La profecía de Gog y Magog de Ezequiel 38-39 es paralela a la visión de Juan en Apocalipsis 17-20, parte de la cual habla de la gran 'ramera', la 'madre de las rameras' que cae"13. De hecho, varias similitudes textuales entre las dos visiones llevaron a Tvedtnes a concluir que "tanto Ezequiel como Juan vieron los resultados de esta gran batalla"14. De manera similar, Nefi vio esta misma visión y empleó los términos "grande y abominable iglesia", "madre de las abominaciones" y "ramera de toda la tierra" (1 Nefi 13:6; 14:10). Doctrina y Convenios no parece presentar una cita exacta de Ezequiel; por lo tanto, es posible que el Señor ofreciera un breve resumen de estos capítulos mientras apelaba a otras visiones del mismo acontecimiento registradas en la Biblia y el Libro de Mormón15.
El porqué
En cualquiera de los tres casos presentados anteriormente, el Libro de Mormón y otras revelaciones modernas ofrecen razones por las que esta profecía puede no aparecer en la Biblia exactamente como se presenta en Doctrina y Convenios. El propio Libro de Mormón describe cómo "se han quitado muchas cosas claras y preciosas del libro, el cual es el libro del Cordero de Dios" (1 Nefi 13:28). El Libro de Mormón también cita a otros profetas que no se mencionan en la Biblia, incluyendo a Zenós, Zenoc y Neum, y se mencionan otros libros en la Biblia que pueden haber sido entendidos como escrituras. Por lo tanto, los Santos de los Últimos Días no tienen ningún problema en aceptar esta profecía como una escritura perdida. De hecho, algunos estudiosos del cristianismo primitivo han utilizado enfoques similares para otros pasajes atribuidos a Ezequiel, como se ha mencionado anteriormente.
Sin embargo, si el pasaje de Doctrina y Convenios se refiere a la profecía de Gog y Magog, el Libro de Mormón de nuevo puede ayudar a aclarar este fragmento profético, ya que la visión de Nefi se compara estrechamente con la profecía de Ezequiel. De este modo, el Libro de Mormón ayuda a los lectores a comprender mejor esta profecía bíblica. Al conectar Ezequiel 38-39 con el Libro de Mormón, los lectores modernos pueden encontrar una clave significativa para interpretar estos capítulos.
En última instancia, basándose en atribuciones tempranas de textos a Ezequiel que ahora no se encuentran en la Biblia y basándose en similitudes entre las profecías existentes de Ezequiel y pasajes comparables en la Biblia y el Libro de Mormón, cada uno de los tres escenarios es "totalmente plausible"16. Tvedtnes concluyó: "No puedo afirmar con certeza cuál de los tres escenarios sugeridos es correcto, si es que lo es alguno. Sin embargo, puedo afirmar inequívocamente que la atribución de la profecía a Ezequiel en Doctrina y Convenios 29:21 es perfectamente razonable"17.
John A. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, en Voices of Old Testament Prophets: The 26th Annual Sidney B. Sperry Symposium (Deseret Book, 1997), 110–21.
- 1. Para consultar la traducción inspirada de Ezequiel realizada por José Smith junto con la versión King James, véase Kent P. Jackson, ed., Joseph Smith's Translation of the Bible: The Joseph Smith Translation and the King James Translation in Parallel Columns (Religious Studies Center, Brigham Young University; Deseret Book, 2022), 220–22.
- 2. John A. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, en Voices of Old Testament Prophets: The 26th Annual Sidney B. Sperry Symposium (Deseret Book, 1997), 111.
- 3. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 111. Las dos historias, una sobre hombres ciegos y cojos, otra sobre "una vaca que dio a luz y no dio a luz", se encuentran en TB Sanhedrin 91a-b y Hechos de Pedro 24, respectivamente.
- 4. 1 Clement 8:2–3; traducción tomada de Michael W. Holmes, ed., The Apostolic Fathers: Greek texts and English Translations, 3ra. ed. (Baker Academic, 2007), 55.
- 5. Holmes, Apostolic Fathers, 55, señala que este pasaje es temáticamente similar a Ezequiel 33 (sugiriendo incluso que podría ser "una paráfrasis laxa"), pero Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy,’” 111–12, sugiere que este pasaje es temáticamente paralelo a Ezequiel 18:30–31.
- 6. Clement of Alexandria, Peadagogus 1.9; traducción tomada de Alexander Roberts y James Donaldson, eds., The Ante-Nicene Fathers: Translations of the Writings of the Fathers down to A.D. 325, vol. 2 (Christian Literature Company, 1893), 231.
- 7. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 113.
- 8. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 114.
- 9. Holmes, Apostolic Fathers, 55.
- 10. Josephus, Antiquities of the Jews, 10.5.2; translation taken from William Whiston, trans., Josephus: The Complete Works (Thomas Nelson Publishers, 1998), 325.
- 11. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 114.
- 12. John Strugnell y Devorah Dimant, “4QSecond Ezekiel”, Revue de Qumran 13 (1988): 54–58; Devorah Dimant y John Strugnell, “The Merkaba Vision in Second Ezekiel (4Q385 4)”, Revue de Qumran 14 (1989): 331–48.
- 13. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 115, citando Apocalipsis 17:1–6, 15–18; 18:1–3.
- 14. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 115–16.
- 15. Otros comentaristas de Doctrina y Convenios también han vinculado este pasaje a la batalla de Gog y Magog descrita en Ezequiel 38–39, pero no proporcionan una discusión sobre esta conexión. Véase Stephen E. Robinson and H. Dean Garrett, A Commentary on the Doctrine and Covenants, vol. 1 (Deseret Book, 2000), 203; Monte S. Nyman, Doctrine and Covenants Commentary, vol. 1, More Precious than Gold (Granite Publishing, 2008), 285.
- 16. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 118–119.
- 17. Tvedtnes, “Ezekiel’s ‘Missing Prophecy’”, 119.