Evidencia #26 | Septiembre 19, 2020

Datación de Moroni 9

Publicación aportada por

 

Scripture Central

Resumen

La segunda epístola de Mormón a Moroni refleja de manera consistente los eventos y las condiciones que se desarrollan en la historia nefita (tal y como se registra en Mormón 4, 5 y 6) de una manera que es sutilmente realista.

Moroni 9 contiene una epístola de Mormón, escrita a su hijo Moroni, que describe el declive espiritual de su pueblo. Aunque Mormón nunca dijo cuándo escribió esta epístola, un análisis cuidadoso demuestra que posee un estrecho paralelismo con los eventos históricos y los temas espirituales que se encuentran en Mormón 456 1. 

Pérdidas en la batalla

En su epístola, Mormón declaró: "he tenido una reñida batalla con los lamanitas, en la cual no vencimos" y en la que "hemos perdido a un gran número de nuestros mejores hombres" (Moroni 9:2). Por varias razones, es probable que esa batalla tuviera lugar durante una serie de retiradas y pérdidas nefitas relatadas en Mormón 5:3–7, que ocurrieron después de que Mormón reasumiera el mando de los ejércitos nefitas2.

Intensa ira y corazones endurecidos

En Moroni 9:4–5, Mormón mencionó que los nefitas habían "endure[cido] sus corazones" contra la palabra de Dios y que "es tan grande su ira, que me parece que no temen la muerte; y han perdido su amor, el uno para con el otro". Del mismo modo, en Mormón 4 aprendemos que "todo corazón se había endurecido" (v. 11) y que los nefitas "marcharon contra los lamanitas, poseídos de una ira sumamente grande" (v. 15). En cada caso, el deseo de "venganza" fue un fuerte factor motivador (véase Moroni 9:5; cf. Mormón 4:15).

Perseverancia

En Moroni 9:6, Mormón declaró: "Y ahora bien, mi querido hijo, pese a su dureza, trabajemos diligentemente; porque si dejamos de obrar, incurriremos en la condenación". Un tema similar, de continuar luchando por el bienestar espiritual de los nefitas a pesar de su iniquidad, se encuentra en Mormón 5:1: "Y aconteció que fui entre los nefitas, y me arrepentí del juramento que había hecho de que nunca más volvería a ayudarles".

"Últimas páginas", de Jorge Cocco

Los prisioneros y el sufrimiento de las mujeres y los niños

Mormón informó a Moroni que "los lamanitas tienen muchos prisioneros que tomaron de la torre de Sherriza; y había entre ellos hombres, mujeres y niños" (Moroni 9:7; cf. Moroni 9:16). La toma de prisioneros nefitas también se mencionó en Mormón 4:13–14: "Y sucedió que los lamanitas... tomaron muchos prisioneros, tanto mujeres como niños, y los ofrecieron como sacrificio a sus ídolos". También está implícito en Mormón 4:21: "Y cuando los acometieron por segunda vez, los nefitas fueron rechazados y destrozados con una mortandad grande en extremo; y sus mujeres y sus hijos de nuevo fueron sacrificados a los ídolos".

Destrucción y deserción

Mormón declaró que sabía que su pueblo "debe perecer, a menos que se arrepientan" (Moroni 9:22). También mencionó que "un gran número de nuestros hermanos se han pasado a los lamanitas, y que muchos otros también desertarán a ellos" (v. 24). Esto coincide con la escena de destrucción, deserción y retirada que se encuentra en el propio registro de Mormón. Mientras su pueblo perdía batallas y huía hacia el norte, Mormón dijo que "empezaron a ser arrasados... como el rocío ante el sol" (Mormón 4:18). La predicción de Mormón en Moroni 9:24 de que aún más nefitas se unirían a los lamanitas se cumplió en Mormón 6:15, que informa de algunos nefitas que sobrevivieron a su última batalla porque "se habían pasado a los lamanitas".

"Mormón en batalla", de Jorge Cocco

Asegurar los registros

Mormón le escribió a Moroni: "confío en que pueda verte pronto, porque tengo unos anales sagrados que quisiera entregarte" (Moroni 9:24). En Mormón 4:23 aprendemos que Mormón fue "por consiguiente, a la colina de Shim, y recogi[ó] todos los anales que Ammarón había escondido para los fines del Señor". Luego, en la batalla final de los nefitas con los lamanitas, Mormón informó que escondió estos registros en Cumorah, todos "con excepción de estas pocas planchas que entregué a mi hijo Moroni" (Mormón 6:6).

Conclusión

No se sabe con certeza cuánto tiempo llevaba Mormón separado de Moroni cuando redactó su epístola. Tampoco es posible determinar cuánto tiempo transcurrió entre los eventos reportados en su epístola y el momento en que fue escrita. Sin embargo, a pesar de estas incertidumbres, el análisis de las conexiones textuales anteriores sugiere que la epístola de Mormón fue escrita muy probablemente en algún momento entre los años 375 y 380 d. C.3. Debe tenerse en cuenta que todo el libro de Éter y varios capítulos escritos por Moroni se interponen entre la epístola de Mormón (registrada en Moroni 9) y los capítulos relevantes del propio registro de Mormón (Mormón 456). Sin embargo, a pesar de esta distancia textual, la epístola de Mormón refleja sistemáticamente los eventos y las condiciones históricas que se discuten en su propio registro.

Lecturas adicionales
Escrituras relevantes
Notas a pie de página
Complejidad
Intertextualidad (interna)
Contexto histórico para Moroni 9
Libro de Mormón